Saturday, August 24, 2019

Por el camino de la Depresión

Desde hace más de veinte días, podría decir que, empezó mi camino hacia la depresión, todo está marcado por una leve molestia que apareció en mi pecho que poco a poco se ha ido desplazando hacia mi corazón, esta molestia es permanente, es una sensación indescriptible, pero se caracteriza por ser incomoda y tornarse fastidiosa, alrededor de esta molestia han aparecido otros signos como la pesadez, las pocas ganas de hablar, permanente sensación de cansancio y somnolencia. El pensamiento recurrente de un suicidio se ha incrementado significativamente, factores externos como la situación económica, el que mi hija Manuela se haya ido de la casa, su traición, el sentir su odio y las permanentes situaciones de “mala suerte” que me ocurren, se suman a la muy deteriorada y complicadísima relación de pareja que tengo con Andrea, una relación enferma, llena de malas situaciones, conflictos alegatos por los mismos temas y recientemente una marcada ausencia de vida sexual que me ha afectado mucho, intento entender la situación por la cual pasa en este momento Andrea, su abuela enferma, su pesado trabajo al igual que su carga académica, pero ¿quién me entiende a mí?
Los únicos refugios que encuentro son Lucía y Gerónimo, de quienes, por mas triste que me siento a toda hora, a veces se me contagia su alegría y buena vibra, pero el convivir con Andrea se ha hecho un infierno, a pesar de todo siento que la amo pero lo más triste es que siento una inmensa dependencia de ella, el miedo de perderla y verla con otro hombre, encontrármela un día embarazada de otro o verla en plan romántico con otro es mas poderoso que cualquier deseo de dejarla. Recientemente estoy pensando nuevamente que está viéndose con alguien y se está acostando con otro, no se si todas las señales que descubro en su cuerpo y su actitud corresponden a una infidelidad o si no es más que mí paranoia, todo el día pienso en su enigmático pasado, del cual cada día me convenzo mas que está lleno de muchos hombres, mucho sexo y libertinaje, se me hace muy difícil pensar que no fue así, pues todo en ella es un misterio y su familia, toda, le tiene mucho miedo, nadie la cuestiona ni nadie nunca la ha confrontado respecto a muchas cosas que en cualquier otra familia hace días lo hubieran aclarado.
Andrea es una mujer hostil, llena de complejos, orgullosa, que nunca pide perdón, arrogante; sin embargo siento una dependencia enfermiza por ella, la verdad no se para dónde voy en la vida, nunca antes me había sentido tan sin rumbo, a la deriva, viviendo el día a día, quisiera salir de todas mis deudas significativas ya y estabilizarme económicamente, volver a la situación monetaria que me encontraba hace cuatro meses, donde le llevaba una ventajita a la vida y el dinero no era un problema. Sin embargo, creo que ni llegando a esa zona de confort nuevamente mi estado de tristeza y depresión desaparecería, lo tensionante que es convivir con Andrea creo que nada lo puede superar. Vivo inmensamente agradecido con ella porque su limpieza, orden y disciplina con los asuntos del hogar nos ha enseñado a todos a vivir en un entorno saludable y a ser unas personas que cuidamos de nosotros mismos, su relación con Lucia es excelente y mi Lucy la quiere mucho y aprende mucho de sus cosas positivas, pero yo siento que me estoy destruyendo y anulando como individuo al lado de Andrea, no creo que en este momento la opción de suicidarme pueda llevarse a cabo, porque el futuro de mis hijas, de gero y de mi mamá está en mis manos y desaparecer de esta miserable vida solo acarrearía dejarlos en muchos problemas, me mantengo vivo mas por ellos que por mí, tal vez si algo garantizara que esos seres pudieran seguir una vida sin muchos tropiezos y sin mí, hace rato hubiera ejercido mi derecho a renunciar a esta payasada de existencia, siento que no le estoy produciendo nada al mundo, no estoy siendo útil, me cuesta trabajo hablar con las personas, siento que debo esforzarme demasiado para hacerlo, también pasa con mis seres queridos, con mi mamá, mi Lucy, con gero y con Andrea, a veces simplemente me gustaría sentarme, mirarlos pero que no les tenga que decir nada, todo me da pereza, no siento motivación por nada, solo quisiera dormir, dormir, dormir y dormir y un día no volver a despertar.
La molestia que siento en el corazón a veces pienso que puede ser algún síntoma cardiaco por toda esta carga de estrés que la vida se ha encargado de entregarme este año, creo que es la forma en que se va a somatizar todo este mierdero, tengo una cita médica la otra semana para consultar al respecto, pero la verdad, a veces solo pienso en no decirle nada al médico, ¡dejar que eso prospere para que sencillamente el ultimo latido llegue pronto y chao!
No tengo a nadie a quien contarle todo esto sin que me juzguen, sin que me señalen, Andrea solo se burlaría de mi y tendría para decir que esto es una payasada o que es una “tusa por el pájaro” y luego vendría la sarta de reproches, insultos, humillaciones y desprecio, mi mamá se moriría de la angustia y del susto, Andrés lo tomaría con morbo y la verdad el anda en sus rollos y sus cosas, que lo voy a cargar con mis maricadas; he pensado en Adrián como la opción mas viable pero definitivamente a quien seguramente acudiré es a Guillermo, que aunque se que lejano está de ofrecerme una solución, es quien mejor puede escuchar todo esto.
Esta semana que vi a Lucy, con gero y con sus amiguitos viendo una película, sentí gusto y envidia, también me pregunte, ¿hace cuanto tiempo yo no me puedo tirar en un sofa a tener tiempo de ocio sin ninguna preocupación en la cabeza? Eso era lo que les pasaba a ellos en ese momento, no tenían ni la más mínima preocupación en la cabeza, que angustia tener que vivir esta miserable existencia, creo que jamás volveré a ser feliz y siento que estoy viviendo por otros y no por mí. Insisto, no se cuanto mas aguantaré esto y no se en dónde va a terminar.